Origen: Viaje Entre Dimensiones

Souichiro, un hombre alto, con un físico bien trabajado y una mirada fiera que casi nunca desaparecía de su rostro. Un cabello corto negro azabache y unos ojos marrones, vistiendo un uniforme negro, se posicionaba frente a sus hombres.

"¡Tráiganlo!" - ordenó el hombre mientras un grupo de sus secuaces arrastraban una jaula, cuyo interior había un hombre, pero no uno común, sino uno de 'Ellos'

"¡Querido!" - gritó una mujer al reconocer al hombre transformado.

Las lagrimas corrieron al observarlo mientras corría para tomarlo, pero antes de que pudiera llegar, Souichiro se puso frente a ella con una mirada fría - "¡¿Por que no me dejas pasar?!"

". . ." - el líder yakusa solo guardó silencio mientras la miraba, haciendo con esto que la mujer temblara de miedo al comprender lo que había hecho, pero para su sorpresa, no pasó lo que ella pensó que sucedería, sino que la persona que la había asustado, se estaba arrodillando frente a ella - "Lo siento... lamento no haber podido defenderlo..."

"Y-Yo..." - la mujer se puso a llorar cuando escuchó esas palabras.

"Mi trabajo era asegurarme de que todos mis hombres volvieran a casa durante la operación, pero él, ese hombre que está dentro, saltó delante de mi para prevenir que una de esas cosas me mordiera" - habló el líder yakusa - "Él se sacrificó por su líder sin pensarlo..."

La mujer solo continuó llorando mientras miraba al hombre que tanto amó.

"Es por eso que lo traje de vuelta... es por eso que voy a darle el descanso que se merece con mis propias manos para que así, puedas visitarlo" - continuó el pelinegro con seriedad - "Voy a volver a hacerlo humano, en vez de ser un animal sin mente"

Lentamente, él se acercó a la jaula y la abrió.

El zombie saltó de inmediato contra el hombre sin siquiera pensarlo.

"Es mi deber como su líder y como la persona que protegió" - Souichiro rápidamente tomó su espada y con un movimiento rápido, decapitó al zombie.

La sangre corrió sin siquiera hacerse esperar mientras la gente alrededor empezó a gritar, o al menos era así para todos menos los hombres bajo el mando de Souichiro y el grupo de Cloud que había llegado al lugar.

"Tousan..." - murmuró Saya al ver una vez más a su padre.

"Saya... mi pequeña princesa" - sonrió el jefe yakusa mientras se acercaba a abrazar a su hija - "Es bueno ver que estás bien... no sabes lo preocupado que estaba"

"¡Tousan!" - gritó en lagrimas la pelirrosa mientras abrazaba de vuelta al hombre.

Los chicos sonrieron al ver la interacción tan normal entre los dos, al punto que habían olvidado la situación anterior donde el hombre decapitó al zombie.

"Es bueno verte, Souichiro-san" - dijo Cloud con calma mientras caminaba junto a los chicos.

"Cloud... veo que tenía razón" - sonrió Souichiro, cosa que sorprendió a más de uno de los presentes, o al menos a los que no conocía la relación entre esos dos.

Souichiro trataba como un igual al rubio, ya que él era quien lo ayudaba en los temas del lado de la Luz, cosas como seguridad, contabilidad, entre otras cosas - "Es bueno ver que llegaron a salvo, Rei, Takashi, ha pasado tiempo, aunque veo muchas caras nuevas"

"Mucho gusto Takagi-dono, mi nombre es Saeko Busujima" - dijo la pelimorada mientras miraba al hombre que tenía en frente.

Ella podía a ciencia cierta que era fuerte, incluso podría decir que era tan fuerte como su padre.

"Así que tú eres su hija" - asintió el jefe yakusa - "Luego te llamaré para entregarte algo que me dejó tu padre"

"Ok" - asintió la campeona de Kendo con una sorpresa que rápidamente desapareció.

"¡M-M-Mucho gusto, mi nombre es Kohta Hirano!" - dijo el joven de lentes.

". . ." - Souichiro lo miró con firmeza, haciendo que el pobre chico empezara a temblar.

"Será mejor que no lo asustes, porque él es uno de los responsables de que Saya haya vuelto a salvo" - dijo Cloud con una sonrisa - "Puede que no lo parezca, pero cuando este chico tiene una arma de fuego en sus manos, es alguien con quien podría ir al campo de batalla sin preocupación"

"Ho~" - Souichiro le dio una mirada más afilada al chico, pero a diferencia de antes, esta vez el joven lo miró de forma salvaje al tener una pistola en sus manos, gracias a Cloud - "Interesante... eres alguien con talento, Kohta Hirano"

"Gracias" - sonrió de vuelta el joven.

"¡Mucho gusto, yo soy Alice!" - dijo la pequeña con una gran sonrisa mientras tomaba al pequeño cachorro - "¡Y este es Zeke!"

"¡Woof!" - Zeke ladró con felicidad.

"Es bueno conocerte pequeña" - sonrió Souichiro de forma cariñosa - "Igualmente Zeke"

"Mucho gusto, soy el padre de Alice, Kei" - dijo su padre con el cuerpo rígido.

El jefe yakusa solo asintió mientras escuchaba como los demás se presentaban.

"Hablaremos luego, tengo que ir a hablar con mi esposa para que organicemos lo que trajimos" - suspiró Souichiro - "Cloud, necesito que vengas en 15 minutos, necesito tus consejos"

"No deberías pedirles consejos a un estudiante" - dijo el rubio de forma inocente.

"Si fueras un estudiante común y corriente, te encontraría la razón" - asintió el hombre - "Pero no lo eres, así que me deja de hacerte el idiota conmigo y ven, es importante"

"Tch... bien..." - murmuró Cloud mientras los demás los miraban con diversión.

"Lo siento mi princesa, pero necesito seguir trabajando" - dijo Souichiro mientras se separaba de su hija.

"Lo se Tousan" - asintió con pena la pelirrosa.

"Hablaremos luego" - sonrió el hombre mientras ponía su mano en la cabeza de la pelirrosa, pero no sin antes decirle algo al oído - "Será mejor que hagas tu movimiento rápido... puedo sentir que hay dos mujeres en ese grupo que ya tomaron su decisión"

"¡¿Tousan?!" - gritó con la cara roja Saya.

"No preguntes como lo se... digamos que es un instinto masculino" - dijo el pelinegro con una media sonrisa - "Yo pasé por algo como eso antes de conocer a tu madre"

". . ." - Saya tenía una mirada incómoda en su rostro porque no esperaba hablar de estas cosas con su padre.

"Como sea, mejor haz lo que quieras hacer, yo te apoyaré sin importar que pase" - dicho eso, Souichiro se retiró.

"¿Que sucede, Saya?" - preguntó Rei con preocupación al ver el rostro rojo de su amiga.

"N-No es nada" - respondió rápidamente la pelirrosa - "Como sea, mejor volvamos dentro"

"Ok" - asintieron las demás, dejando nuevamente a los chicos solos.

"Takashi... ve donde Airi y pasa todo el tiempo que puedas con ella" - dijo Cloud con seriedad - "En momentos tensos como los que hemos vivido, necesita estar con alguien que la haga sentir segura"

"Ok" - asintió el joven mientras caminó donde las chicas.

"¿No debería estar bien con las demás?" - preguntó Kohta.

"Si fuera solo algo como un incendio, tendrías razón, pero en una situación como esta donde hay cadáveres por todos lados..." - respondió el rubio con seriedad.

"Comprendo..." - asintió el joven de gran masa - "¿Entonces ahora que?"

"Vamos donde Souichiro" - dijo Cloud con calma - "Tú me acompañarás, después de todo, no creo que quieras volver a pelear con esos idiotas bajo el mando de los que me odian"

Kohta solo lo siguió en silencio, aunque la mirada de respeto que tenía, no podía ocultarse.

* * * * *

En estos momentos los altos mandos bajo el control de Souichiro, nuevamente se habían reunido, solo que esta vez, algunos de ellos no tenían esa sonrisa condescendiente que habían tenido antes, sino que ahora era miedo, un profundo miedo estaba presente en sus rostros.

El más viejo de ellos tenía sonrisa divertida al ver el terror en las miradas de sus rivales, ya que sabían muy bien porque estaban así.

"Les dije que no hicieran esa estupidez" - dijo el hombre de moicano - "No solo Souichiro-sama es fuerte, sino que también tiene soldados leales"

". . ." - los demás solo guardaron silencio.

"¡¿Como es posible que esto fallara?!" - gritó el hombre gordo con una mezcla de furia y miedo.

"Nunca subestimen a Souichiro-sama, él es más de lo que ustedes piensan" - respondió el hombre más viejo - "He estado en este puesto desde que su padre estuvo en el poder, así que he visto como la familia a crecido durante estos años y déjenme decirles que no se puede describir con solo palabras"

"Souichiro-sama solo poseía la mansión y una pequeña zona alrededor de esta y ahora él posee casi el completo control de esta zona de la cuidad" - continuó el hombre - "Solo con eso, uno puede darse cuenta del talento y poder que posee nuestro líder"

"Esto es malo..." - murmuró el hombre con cicatrices - "Si Souichiro se entera de que lo intentamos sabotear..."

"Estoy seguro que lo sabe" - suspiró el más viejo - "¿Pero saben que es lo peor? Lo peor es que él se lo contará a Cloud-dono y ahora tendremos a dos Souichiro"

"!" - los 4 hombres que se juntaron para apuñalar por la espalda a su jefe, miraron al mayor de ellos con sorpresa.

"¡¿Que quieres decir?!" - golpeó la mesa el hombre gordo.

"Fácil, Cloud-dono no se metía en asuntos de la familia porque él solo quería tener una vida normal" - respondió el hombre de 60 años - "Pero no creo que esto sea posible con la situación actual"

"Muerte por todos lados, odio, avaricia, traición son pan de cada día" - suspiró el hombre con canas - "¿Acaso creen que con eso, Cloud-dono se mantendrá neutral?"

"!" - los hombres empezaron a temblar del miedo, si un Souichiro ya era malo, dos será mucho peor.

"Recuerden, un dragón dormido no es dañino... pero uno que es molestado hasta que despierta..." - dicho eso, el hombre mayor se retiró de la sala - "No es necesario que siga diciéndolo, estoy seguro que ya saben lo que se avecina"

". . ." - el silencio se hizo eterno en la sala mientras los 5 hombres caían en sus asientos.

No solo habían fallado en su intento de matar a su jefe, sino que ahora tenían a un hombre igual a él, en sus espaldas.

"¿Que hacemos ahora?" - preguntó el hombre gordo con miedo, él sabía muy bien que si Souichiro no lo mataba, lo haría Cloud, después de todo, él había estado picando el panal de abejas por años.

"Solo queda mantenernos en bajo perfil y rogar que ninguno de esos dos, haga algo" - dijo el hombre con moicano. Él era el menos afectado de la situación, ya que solo había guardado silencio y sinceramente, solo había mandado a atacar al rubio una sola vez, luego de ver el estado de su enviados, hizo todo lo posible por ponerse en el lado bueno del joven - "Cloud antes no mataba, a lo más dejaba a nuestros enviados con heridas graves, pero ahora... él ya no necesita contenerse y por lo que veo, tampoco lo hará"

"Si eso es todo, yo me retiro" - dicho eso, el hombre de moicano también se retiró de la oficina, dejando a sus 4 aterrados compañeros.

* * * * *

Cloud estaba en estos momentos llegando a la oficina de Souichiro acompañado de Kohta.

"Pasa" - dijo el Takagi si quiera antes de que el rubio tocara la puerta.

"Eso sigue siendo molesto" - dijo Cloud con el ceño fruncido.

"No es como si tú nunca me lo hubieras hecho" - Souichiro solo le dio una sonrisa divertida, eso pasaba cada vez que iba a visitar al rubio o a pedir los reportes de su zona personalmente.

"Sigo preguntándome como es que el jefe de los yakusa viene a mi casa para escuchar el reporte personalmente" - suspiró el rubio.

"Porque así puedo ver si mis hombres me mienten" - respondió el pelinegro con frialdad - "Como sea, no fue por eso que te llamé"

"Déjame adivinar, esos idiotas hicieron de las suyas a parte de casi cagar la paz del lugar" - suspiró nuevamente el rubio.

"Es bueno hablar con gente inteligente, así no tengo que andar explicando tanto" - asintió el hombre de mirada salvaje - "Esos idiotas intentaron atraer una horda de esas cosas contra nosotros, tal parece que uno de mis hombres de la misión, estaba de parte de cuatro de ellos"

"El gordo, el de las cicatrices gruesas, el flaco rojo y el de lentes" - dijo Cloud mientras se encogía de hombros - "Estoy seguro que el viejo y el moicano son inteligentes"

"Pienso lo mismo" - asintió Souichiro - "Es por eso que sigo queriendo que seas mi heredero"

"Ya hablamos de esto" - suspiró el rubio.

"Vamos, eres fuerte, inteligente y Saya-chan te quiere" - dijo el hombre de cabello negro mientras su esposa lo miraba con diversión - "Eres el heredero perfecto"

"Lo siento, pero digamos que ya estoy en ... una... relación" - dijo Cloud con calma.

"Solo déjalas y ven con mi pequeña" - dijo el hombre.

"Lo siento pero no. puede que Saya sea una hermosa mujer, pero no voy a abandonar a esas dos" - respondió Cloud con calma.

"¿Dos?" - preguntó Souichiro.

"Es complicado pero es cierto, son dos" - asintió Cloud - "Ellas son mis chicas y no las dejaré por nada"

"¡Jajaja!" - Souichiro solo soltó una carcajada cuando escuchó eso - "¡No me equivoqué, eres igual a mi en mi juventud!"

"Solo que más apuesto" - sonrió el rubio.

"Si claro" - bufó el jefe yakusa - "Pero eso solo será por un corto tiempo, pronto encontrarás a una mujer que te amarre del cuello y no te dejará seguir con ese tipo de cosas"

"Lo siento pero es imposible" - negó el rubio - "Puede que tengas razón, pero digamos que mi situación es algo diferente"

"¿Y como sería eso?" - preguntó Yuriko con curiosidad - "¿Que te hace tan diferente del resto?"

"Lo siento pero no puedo decirlo" - negó nuevamente el rubio - "Como sea, será mejor que cambiemos el tema"

"Ok... pero no me rendiré con eso de que quiero que seas mi sucesor" - dijo con molestia el pelinegro, tenía que admitir que al igual que él, Cloud era terco como una mula.

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Capítulo extra traído por el usuario de pa-treon: Luis David Rojas Saavedra.

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